Investigación de última hora: Sufridos gatos civetas enjaulados por café
PETA les pide a los turistas que nunca compren el cruelmente obtenido kopi luwak
Madrid – Esta semana, PETA Asia reveló nuevas imágenes de investigación encubiertas de civetas de palmera asiática que caminan de un lado a otro frenéticamente y balancean la cabeza en jaulas sucias y estrechas en granjas de Indonesia para obtener kopi luwak, el cual es hecho con granos de café que los animales comen y excretan.
Indonesia es el principal productor mundial de kopi luwak, y los investigadores de PETA Asia han descubierto cómo la industria deliberadamente etiqueta erróneamente el café de gatos civeta cautivos como “de origen silvestre” para engañar a los consumidores y minoristas. Un productor desestimó las afirmaciones de abastecimiento silvestre como “marketing”, mientras que otro admitió la dificultad de obtener heces que contengan bayas de café de gatos civeta que deambulan libres. Según un trabajador, los granjeros no pueden recolectar más de 20 kilogramos de heces al año de la selva y hasta 400 kilogramos al año de gatos civetas encerrados, a quienes obligan a ingerir bayas de café. Las empresas ofrecen certificados insignificantes para tratar de engañar a los consumidores para que piensen que la producción de kopi luwak es ética de alguna manera.
“Cada taza de kopi luwak representa el sufrimiento de animales sensibles confinados a una vida infernal en cautiverio”, dice la vicepresidenta de PETA para el Reino Unido, Europa y Australia, Mimi Bekhechi. “PETA insta a todos los viajeros a que se nieguen a apoyar esta industria de tormento y maltrato, y elijan una de las muchas exquisiteces respetuosas con los animales de Indonesia”.
A pesar de ser una especie protegida por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, las civetas de palmera asiática suelen capturarse cuando tienen alrededor de 6 meses de edad y no se les da casi nada para comer, excepto bayas de café para producir kopi luwak. Además, enjaular a los animales entre sus propios desechos e inducirles estrés crea un caldo de cultivo para enfermedades zoonóticas. El SARS, que tiene una tasa de mortalidad humana estimada de alrededor del 15%, se ha propagado de los gatos civeta a los humanos.
PETA, cuyo lema dice en parte que “los animales no son nuestros para abusar de ellos en ninguna forma”, se opone al especismo, una visión supremacista del mundo. Para más información, por favor visite PETA.org.uk o siga a la agrupación en Facebook, Twitter o Instagram.
Contacto:
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